Mi nombre es Raffaello Sandio, nací en Urbino, una pequeña ciudad de Italia, el 6 de abril de 1483. Fuí un pintor y arquitecto italiano del Renacimiento. Mis obras representan el paradigma de este, ya que se basan en la perfección de la luz, la composición y la perspectiva.En el año 1491, muere mi querida madre, quedó con mi padre, quién fue un pintor y humanista y me introdujo en las ideas filosóficas de la época y en el arte, pero falleció cuando yo solo tenía once años de edad. Después de aquello pasé por casas de distintos familiares, ahí pude observar los distintos cambios sociales, políticos y económicos que estaban surgiendo en mi país. La economía creció y cambió el tipo de comercio. Hubo un aumento de población y crecimiento de ciudades en el hábito social. La iglesia empezó a perder poder y riqueza que había poseído durante toda la Edad Media. Todos estos acontecimientos no me impidieron poder llegar a la casa de Timoteo Viti, quien fue mi aprendiz.
Antes de cumplir los 17 años, en el año 1500, me enviaron donde el pintor Pietro Perugino, del cual estoy muy agradecido, ya que me enseñó las técnicas pictóricas de finales del siglo XV. Bajo su influencia hice muchas obras como "Las Tres Gracias". Mi primera gran obra fue "Los desposorios de la Virgen".Desde 1504 hasta 1508, trabajé en Florencia, ahí fue donde recibí la influencia del arte de Leonardo da Vinci y Miguel Ángel, también ahí realicé el retrato "Joven con la manzana" y mi obra maestra "Mujer encinta".
En 1508 viajé a Roma, ahí fue donde el Papa Julio II me encomendó la decoración de los aposentos en el Vaticano, lo cual fue un avance muy importante en mi carrera.
Entre 1509 y 1511 decoré la Estancia de la Signatura, donde pinté las figuras de la Teología, la Filosofía, la Poesía y la Justicia en los cuatro medallones de la bóveda.
El 6 de abril de 1520, sin alcanzar a terminar mi fabulosa obra, la Transfiguración, ocurrió el suceso más inesperado de la historia en aquella época, fallecí.
